Tras varias semanas de abril, en las que el calor empezaba a hacer acto de presencia, un buen día durante la tertulia del café con los amigos se nos ocurrió empezar a programar actividades para hacer algo de ocio los fines de semana y divertirnos a la vez que descubrir nuestra comunidad autónoma. Pues bien, el primer viaje que se programó fue ir a Alcázar de San Juan puesto que el fin de semana anterior uno de nosotros había visitado las lagunas de ruidera y estaban preciosas ya que había llovido tanto durante el invierno. Nos llamó la atención éste destino puesto que debido a las lluvias habían resurgido dos ríos (Záncara y Cigúela) a su paso por la ciudad de Alcázar de San Juan, y se podía ver su afluencia de éstos. Ahora bien, empecemos la aventura, el domingo tras prepararnos todo nuestro picnic y estar todos nos dirigimos hacia Alcázar de San Juan, donde, al llegar, buscamos esos maravillosos ríos. Al llegar allí nos dirigimos hasta una zona en la que habían unos humedales (entendamos por humedales charcos grandes), así que decidimos que como se acercaba la hora de comer haríamos un descanso para dar un paseo antes y después ya ver todo el paraje y acercarnos más al afluente en coche si era necesario. Para nuestra sorpresa, al empezar a pasear encontramos a un matrimonio autóctono de Alcázar de San Juan, a los cuales se nos ocurrió preguntarle por la afluencia de dichos ríos para acercarnos y comer más cerca:
-Perdonen, estamos buscando el punto del afluente del río Záncara junto con el rio Cigüela.
-Es aquí, es esto.
-¿Es esto? –(Miradas entre nosotros de ¡¿qué nos hemos perdido? ¿Qué era lo que esperábamos? ¿Qué tenemos delante? ¿Qué está pasando?!)
-Si si, es esto, esto es donde los ríos se juntan y a partir de aquí siguen juntos hacia lo que es la autovía.
-Ya pero… creíamos que era un poco más… - (queríamos decir que esperábamos alguna cascada, algo de ruido del agua al correr por el suelo, algo más..)
-Si si, es aquí. Veréis, todo esto antes estaba seco, no había nada de vegetación, y esto lleva sin pasar casi 50 años.
-Ya pero esperábamos algo más… ¿Dónde se pueden ver los ríos?
-No no, los ríos imposible, sólo hay un punto por el que se pueden ver, pero es en la autovía, por lo que os será imposible parar el coche para poder observarlo. Esto es la afluencia, es decir donde se juntan los ríos. -Vale, gracias, muchísimas gracias. – entre todos nosotros había caras de: voy a explotar a reír porque no sé que esperaba encontrar pero no puedo porque esta gente se puede enfadar.
Tras andar y dar un paseo decidimos por fin coger el coche y buscar el mirador de Alcázar, en el que se puede observar toda la ciudad y las lagunas de Villafranca de los caballeros y además también podemos encontrar varios molinos para visitar, aquí pasamos el día y reímos hasta la saciedad para después volver a casa, cuando, de camino por la autovía, pudimos ver por fin los ríos.
MORALEJA: Aunque te desplaces, no sepas lo que buscas, y no sepas qué has encontrado, siempre quedará la gente que te acompaña y la experiencia que estás viviendo junto a ellos.
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